Nunca resultó tan sencillo percibir la esencia marinera de uno de los puertos pesqueros con más tradición de Bizkaia, Santurtzi.
Desde Bilbao, en metro o tren, se antoja indispensable transitar por el municipio y descubrir cada uno de sus tesoros de mar: El Santurtzi Itsas Museoa fiel testigo de las hazañas y desventuras de profesionales del mar y contrabandistas y el Barco Museo Agurtza, imponente embarcación de madera que ensalza el duro trabajo de los arrantzales para pescar el bonito más preciado en nuestros fogones.
Recorrer el puerto pesquero de Santurtzi resulta esencial para los amantes de la buena gastronomía, de los aromas del mar y de los pintxos más aclamados con productos frescos y de temporada.
A su lado, el Paseo Marítimo Reina Victoria se convierte en un bello escenario de embarcaciones dedicadas a la pesca y recreo resguardadas bajo el monumento a la Virgen del Carmen, patrona del municipio desde 1907 y una centenaria grúa de mano parte de nuestro origen industrial.
A pocos metros del puerto, el centro se presenta como un libro abierto de historia y arquitectura gracias a la iglesia de San Jorge, el ayuntamiento, el Palacio Casa Torre y el Quiosco de música con pintorescas imágenes de las sardineras, mujeres dedicadas a la venta de pescado en sus ovaladas cestas de mimbre.
El monumento de bronce en honor a la Sardinera, a tan sólo 15 minutos a pie del palacio Casa Torre, rememora su incansable esfuerzo para llevar el pescado más fresco a Bilbao y a territorios singulares como Balmaseda, primera villa de Bizkaia.
Finalizada la andadura por Santurtzi, la despedida se torna dulce en El Bote Tours, surcando las aguas de la Bahía del Abra y de la ría Nervión-Ibaizabal mientras recordamos con cercana nostalgia el municipio de Santurtzi y la alegría que emanan visitantes y autóctonos.
